
Nuestras raíces
Al igual que los árboles, el anclaje de nuestras raíces es fundamental ya que, aunque las raíces más viejas no provean de agua al árbol, el paso de los años las ha convertido en las más fuertes y en las únicas capaces de sostenerlo y proveerle de la savia bruta, capaz de alimentarlo y hacerlo crecer.